Mitos y verdades sobre Conga y otros proyectos mineros.

Un solo puño para luchar frente a Yanacocha.

Mito: El proyecto minero generará muchos puestos de trabajo directo e indirecto a la población

Verdad: Los proyectos mineros requieren de mano de obra no calificada sólo al inicio, cuando hace las obras iniciales, pero después, ya en la etapa de producción, usan solamente mano de obra altamente especializada, la mayoría de la cual no es reclutada entre gente de la zona. Es bastante precario pretender hacer creer que porque algunos de estos empleados comprarán algún menú o parcharan sus llantas en un taller, se está generando “trabajo” para todos. Además la actividad minera es pasajera (hasta agotar el yacimiento).

Mito: Los Estudios de Impacto Ambiental (EIA) garantizan que la extracción de minerales se hará contando con todas las garantías ecológicas y de salubridad para los pobladores.

Verdad: Hay muchísimos ejemplos de los efectos contaminantes de la actividad minera en Cajamarca. Algunas de las lagunas “muertas”: Yanacocha, Corazón, Maki-Maki, San José, entre otras (más de veinte). Todos los proyectos involucrados tuvieron un EIA aprobado. De hecho, adivinen: ¿Cuál es el número de EIAs rechazados por el Ministerio de Energía y Minas? Cero. Ninguno. Obviamente porque es el organismo promotor de la minería.

Mito: Conga propone secar cuatro lagunas para extraer el mineral (oro) que existe debajo de ellas pero ofrece reemplazarlas con la construcción de reservorios, de esta manera se podrá asegurar el abastecimiento de agua en Cajamarca, siendo un mecanismo más eficaz que permite almacenarla para épocas de sequía.

Verdad: No es la primera vez que Minera Yanacocha ofrece un reservorio para impedir la escasez de agua. Un ejemplo de ello es el Reservorio de San José que debería dotar de suficiente líquido elemento a Cajamarca. En la práctica no han cumplido: la ciudad tiene agua sólo por horas. Otro punto importante es que las lagunas no se pueden “trasladar” de un lugar a otro como si se tratara de un “recipiente”. Son parte de un delicado equilibrio del ecosistema en el ciclo que dota de agua a los suelos: plantas, animales y personas dependen para su supervivencia de conservar los humedales, pantanos, ríos y lagunas.

Mito: Si no se viabiliza el Proyecto Conga (y otros proyectos mineros) no habrá ingresos (gravamen) para hacer realidad los programas sociales tipo Cuna Más, Pensión 65, etc.

Verdad: Este argumento es un chantaje de los empresarios mineros para desestabilizar al actual Gobierno. Si el Presidente Humala hace cumplir el pago de impuestos que adeuda Telefónica del Perú habrá dinero suficiente para cumplir con sus promesas electorales. Y como país lo único responsable es aprender a vivir del uso sostenible de nuestros recursos naturales renovables.

Mito: Los que se oponen a los proyectos mineros son agitadores, “resentidos de izquierda”, “antimineros”, enemigos de la inversión extranjera y del “progreso”: “No comen, ni dejan comer”
(Tesis del Perro del Hortelano, enunciada por Alan García).

Verdad: Después de 18 años de inversiones mineras efectuadas en Cajamarca y otras regiones del país, de los daños ambientales y de salud irreparables para las comunidades, ha surgido un nuevo movimiento social que se organiza de manera pacífica para exigir que se respete su derecho a vivir con el modelo de desarrollo y progreso que han elegido: uno ecológicamente sustentable.

 

Fuente: Tierra y Libertad.

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